Ingenioso y divertido cuento, que invita a reir a grandes y chicos, a través del cual es posible el ingreso de la lectura escatológica al aula. Las imágenes y las onomatopeyas se encargan de mostrar "aquello" que las palabras ocultan.
Este tipo de lectura no tiene habilitada la entrada en la escuela. Porque de "ESO" no se habla en la escuela. Pero, ¿por qué?